sábado, 18 de octubre de 2014

Una Menorah en Sobrarbe. New light on Judaism in Aragón (Spain-Sefarad)


Menorah, conservada de forma parcial. Museo Paleontológico de Sobrarbe
Hoy doy a conocer la primera evidencia arqueológica de la cultura judía en Sobrarbe. Se trata de una piedra que presenta grabados por una cara. Antes de hablar de la piedra en cuestión, considero necesario hacer una pequeña introducción, ponernos en contexto; es necesario saber cuándo hubo judíos en Sobrarbe y qué es una menorah.

Presencia de judíos en Sobrarbe
La dispersión o diáspora de los judíos por todo el ámbito mediterráneo se relaciona con dos hechos: la destrucción de Jerusalén en el año 70 después de Cristo y la represión contra ellos llevada a cabo en el año 135.
No se sabe si en Sobrarbe hubo judíos entre los siglos I y XI. Sí hay constancia documental de una aljama judía en Monclús, al menos desde el siglo XII hasta mediados del siglo XIV. Se estima que en Monclús hubo una población judía que rondaría las 100-150 personas. El Concejo o “municipio” de Monclús-Montclús englobaba las localidades de Monclús, Mediano, Plampalacios y Arasanz. En la “villa” de Monclús la población judía quizá fuera mayoritaria hasta el año 1320, momento de la masacre que supuso el principio del fin de la aljama judía. En el último tercio del siglo XV el núcleo de Monclús estaba deshabitado, siendo Mediano la capital del concejo, en un principio considerado aldea, aunque luego pasó a ostentar la capitalidad.
En Aínsa hubo otra pequeña comunidad judía desde mediados del siglo XIV hasta el primer tercio del siglo XV.

¿Qué es una menorah?
Una menorah es un candelabro de siete brazos. Se trata de uno de los principales símbolos judíos, muy antiguo. Parece tratarse del símbolo de la palabra de Dios, de la iluminación espiritual, de la Verdad; todo ello unido al número siete y sus connotaciones. A lo largo de los siglos ha habido múltiples diseños.
Menorah de Andriake
Foto: ver bibliografía
 

Un resto de menorah en Sobrarbe (ver primera foto del artículo)
Se trata de una piedra, arenisca calcárea, un poco deteriorada por el paso del tiempo. La piedra en cuestión presenta ornamentación en una cara, grabada de forma sencilla, esquemática y rústica. Lo que se observa es una parte de la composición primitiva, un fragmento, por lo que es necesario interpretar e imaginar, con el consiguiente riesgo de equivocación. Posiblemente se trate de un fragmento de placa de sepultura.
En posición central se halla representado esquemáticamente el candelabro o menorah, viéndose 5 de los 7 brazos que debió tener todo el conjunto. Los brazos son más rectilíneos de lo que es habitual en otras representaciones parecidas. Base ausente. Tallo o tronco recto, sin ornamentos, acompañado a ambos lados por sendas espirales levógiras (una de ellas de mayor tamaño) lo que confiere singularidad a esta representación. Una espiral está asociada a dos trazos difíciles de interpretar por estar la pieza incompleta. Estos trazos incrementan la asimetría del conjunto.
Interpretación de la Menorah sobrarbesa.
Mirando en Internet las distintas publicaciones y páginas que hay sobre el tema, puedo afirmar que la presencia de espirales o “scrolls” asociadas a la menorah no es nada habitual, porcentaje inferior al 5%. En Turquía, en la antigua Asia Menor o Anatolia, es donde se concentran este tipo de representaciones.

Comparativa de la Menorah de Sobrarbe con la de Andriake en vista parcial. Se observa un gran parecido en el diseño, salvando las enormes distancias en lo que se refiere a la calidad de la obra y a la litología.


 

Todas estas “Menorahs” que se ven en la foto son de Asia Menor (Andriake, Priene, Sardis, Iznik), salvo la del capitel que es de El Golán, la cual evidencia la posibilidad de que el origen de la menorah con espirales asociadas esté en los capiteles de orden jónico. La cronología de estas obras oscila entre los siglos III y VII. Vemos que cada menorah tiene dos espirales asociadas, una dextrógira y otra levógira, salvo un caso en el que las dos espirales son dextrógiras, al contrario de lo que ocurre en Sobrarbe (ambas levógiras).

 
 
La menorah de Sobrarbe, atendiendo a la historia de la zona, parece ser de los siglos XII-XIV, si bien no es seguro. En simbología, las espirales levógiras se asocian a la destrucción, a la muerte, apropiado para una estela funeraria. No está claro que el autor elaborara las espirales pensando en esto, más bien parece que imitaba, dentro de sus limitadas posibilidades, otra menorah de mayor calidad que estaría en la sinagoga.
Surge una cuestión intrigante. Cabe la posibilidad que los judíos de Sobrarbe estuvieran relacionados culturalmente con los judíos de Asia Menor. En este caso los judíos de Sobrarbe provendrían de Turquía.
Es posible que las espirales sean heredadas de la cultura autóctona local, con antecedentes celtas. En este caso se habría dado una convergencia morfológica con las expresiones artísticas de Asia Menor, sin relación directa entre ambas.
Puede ser que ambas expresiones artísticas judías: las de Sobrarbe y Asia Menor, tengan un origen en la cultura indoeuropea, y las espirales no deriven de la representación de los rollos de la Torá, que sería otra posibilidad.
En definitiva, las espirales levógiras asociadas a la menorah de Sobrarbe dan al conjunto un toque de singularidad, quizá único en la cultura judía
BIBLIOGRAFÍA
 
 
 

4 comentarios:

  1. Gracias, Jesús, por darnos a conocer este nuevo hallazgo que nos descubre y da a conocer un poco más la historia de nuestros antepasado por estas queridas tierras del Sobrarbe.

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  2. Mª Pilar, gracias por tu comentario.
    Un abrazo

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  3. Muy interesante tu hallazgo y la didáctica divulgación de tu investigación. Enhorabuena.

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